piscinas y jardines : Cuidado del césped

Cuidado del césped

El esplendor de una pradera depende de su estado. Para que éste se encuentre en buenas condiciones, es necesario que exista un adecuado mantenimiento. Se trata de realizar una serie de tareas básicas: riego, resiembra y recebo, control de plagas y enfermedades, siega y fertilización.

Riego
Es muy común regar las praderas en exceso, con seno perjuicio para el césped. Para tenerlo en buenas condiciones, lo más aconsejable es instalar un sistema de riego aéreo con difusores o aspersores, y un programador automático que controle los tiempos de riego. Excepto en el periodo de germinación, en el que se debe regar con frecuencia para mantener la humedad, el césped precisa dosis de 12 litros de agua por m2 cada dos o tres días. El negó siempre se realizará durante la noche; si esto no es posible, se puede hacer al atardecer o al amanecer, cuando hay una menor evaporación del agua y, por tanto, resulta más efectivo.

Resiembra y Recebo

• El ob]etivo de la resiembra es cubrir las calvas de césped ocasionadas por el mantenimiento o el uso inadecuado de la pradera.
• Esta labor se deberá realizar en otoño o pnmavera. épocas en las que las semillas germinan con mayor facilidad.
• La dosis de resiembra será de 10 a 35 gramos por m2, dependiendo de lo deteriorada que se encuentre la pradera.
• Como labores previas, se aconseja escardar y voltear la tierra.
• Tras la resiembra, se aplicará un recebo de arena y turba al 50%. ya que ayuda a la semilla a germinar y mejora la estructura del suelo.

Cuidado del césped
El esplendor de una pradera depende de su estado. Para que éste se encuentre en buenas condiciones, es necesario que exista un adecuado mantenimiento. Se trata de realizar una serie de tareas básicas: riego, resiembra y recebo, control de plagas y enfermedades, siega y fertilización.

Control de Plagas y Enfermedades
La mejor lucha contra las plagas y enfermedades de las praderas es la prevención. Es conveniente seguir una serie de normas:

• Elegir especies y variedades de césped resistentes.
• Limpiar la maquinaria de siega y mantenerla en buen estado.
• Retirar todos los restos de la siega.
• Seguir un adecuado plan de fertilización y tratamientos fitosanitarios.
• Evitar el exceso de riego.
• Prevenir a toda costa la apanción de malas hierbas.
• En caso de detectar una enfermedad, tratar cuanto antes con los productos adecuados.

Siega
Para que esta actividad sea beneficiosa para el césped, se deben seguir los siguientes consejos básicos:

• Evitar cortar el césped cuando la hierba está mojada.
• Utilizar la máquina a medio gas, limpia y con las cuchillas bien afiladas.
• No se debe cortar de una sola vez más de un tercio de la altura de la hierba, y nunca se hará el corte muy bajo.
• Hay que recoger siempre los restos de la siega

Fertilización
Para mantener un adecuado crecimiento y una buena reproducción vegetativa, las praderas tienen que abonarse correctamente. Los fertilizantes orgánicos sólo se deben aplicar en el momento de la siembra. En primavera se pueden emplear fertilizantes minerales de vanos tipos:

• Nitrógeno. Proporciona a la pradera un bonito color y asegura su vigor general.
• Fósforo. Mejora el enraizamiento y desarrollo de las plántulas tras la siembra.
• Potasio. No sólo favorece la fotosíntesis y la acumulación de las sustancias de reserva sino que también aumenta la resistencia de la hierba al frío, a la sequía, a las enfermedades y al pisoteo.

Cuidado del césped

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