planos de jardines : Pradera para el jardín

Pradera para el jardín

Antes de empezar a formar una pradera, se deben conocer los distintos tipos de césped que existen. La elección no sólo dependerá del uso que se le quiera dar, sino también del tiempo que se pueda dedicar a su mantenimiento.





Recomendaciones

• No es habitual formar una pradera a partir de un solo tipo de hierba; lo más recomendable es combinar distintas variedades. Así. cada una aportará sus ventajas, y el conjunto se adaptará mejor a los factores ambientales del jardín.
• Es aconsejable calcular cuánta superficie de pradera se va a necesitar realmente para los usos a los que esté destinada, ya que el césped es uno de los mayores consumidores de agua, y éste es un bien escaso.

Pradera para el jardín
Antes de empezar a formar una pradera, se deben conocer los distintos tipos de césped que existen. La elección no sólo dependerá del uso que se le quiera dar, sino también del tiempo que se pueda dedicar a su mantenimiento.

• En un jardín con vegetación densa, el césped resulta muy adecuado para equilibrar la plantación, permitiendo actividades de ocio que no podrían realizarse sobre otro tipo de plantas.

Tipos de praderas
Ornamental
Es un césped muy estético. aunque requiere mucho mantenimiento para conservarlo en buenas condiciones. Necesita riegos continuos, pues de lo contrano se verá rápidamente invadido de malas hierbas.
Es exigente en cuanto al abonado y todos los años requiere una labor de escarda para airear la tierra.
Éste es el césped ideal para cubrir aquellas zonas que nunca se pisan y que se desean ver bonitas, como la entrada de una casa o el jardín de un edificio de oficinas.

De recreo
Esta pradera es muy adecuada para aquellas personas que no disponen de demasiado tiempo para realizar labores de mantenimiento. Soporta una menor regularidad en cuanto al negó, sin comprometerse por ello su calidad estética. Resiste el pisoteo continuo y. dado el tipo de plantas que la componen, es capaz de competir con las malas hierbas a pesar de los descuidos en el mantenimiento. Además, soporta ligeros niveles de cloro procedente de las piscinas. Conviene, no obstante, proporcionarle algún abonado mineral durante la época de crecimiento.

De uso intenso
Su pnncipal característica es su resistencia al pisoteo continuo, junto con una elevada rusticidad. Es la pradera ideal para zonas de juegos de niños y animales de compañía, áreas sociales e instalaciones deportivas. Se compone de especies muy rústicas, capaces de soportar una intensa actividad y un escaso mantenimiento. Sin embargo, son necesarias ciertas labores, como una siega un poco baja y un riego abundante cada vez que sea sometida a duras agresiones y pisoteos.

Las otras praderas
Si el césped está en una zona de umbría, se desarrollará de forma débil por la falta de luz solar, empezará a hacerse cada vez menos denso y se producirán las primeras calvas. Una solución es resembrar con semillas de festuca, una especie más resistente a la sombra. A pesar de que el césped está compuesto esencialmente por diferentes vanedades de gramíneas, también se pueden utilizar otras especies de igual interés e incluso mayores ventajas. Así, por ejemplo, la dichondra. con hojas en forma de corazón, forma un manto que requiere muy poca siega (a lo sumo una vez al mes) y soporta muy bien la sombra. Su único inconveniente es que se resiente cuando es pisoteada en exceso. Otra vanedad muy conocida es el trébol, tanto el blanco como el rosa.

Pradera para el jardín

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